Lalita in Live

El miércoles 21 de octubre  a las 7:45 am me dormí en la sala 7 de cirugía en el Hospital Enrique Baltodano Briceño, lo que para mi fue un sueño profundo resulto en una cirugía de 10 horas aproximadamente. Pero todo esto empezó hace 5 meses. Cáncer Papilar de Tiroides, con metástasis bilateral, el tratamiento recomendado una tiroidectomia y disección radical de cuello modificada (no lo googlee, es muy gráfico y si lo hace, hagalo bajo su propio riesgo). El peor escenario eran problemas con las venas yugulares y la aorta, algún tipo de sagramiento excesivo, daño al punto de la muerte, falla repiratoria por el asma y bueno, nada de eso paso, nada de eso. El mayor problemas fue la sorpresa que se llevo mi doctora al abrirme, el cáncer estaba más esparcido y arraigado de lo que los exámenes revelaban, muchos de los nervios estaban comprometidos, raspado a tal punto que e considero un traqueotomia y perdida de las paratiroideas, pero mi doctora no estaba sola, además del enorme talento que

"¿Que hice?" era la pregunta que rondaba su cabeza, pero ya era tarde. Ella se había ido a un lugar donde él no podía alcanzarla. Ella se había librado del dolor para siempre.O por lo menos es lo que a ella le gustaba pensar. - Si no te molesta, voy a ir a almorzar, te voy a traer algo, esta bien?- la voz de Ricardo resonó en la mente de Lusiana. Ella asintió. - Don Ricardo, disculpe esta escena, le puedo asegurar que no se va a repetir- le dijo torpe y contrariada. Él le rozo el rostro con la mano para liberarla de una lagrima rezagada. -No te preocupes por eso, vamos a trabajar y mantener la mente ocupada, te parece?. Ahora, lo mejor seria que fueras al baño y te lavarás la cara, mientras yo traigo el almuerzo. Ella le sonrió y agradeció al cielo por enviarlo. Definitivamente el era el Perseo que la iba a librar de las cadenas que la ataban, no romanticamente, pero por lo menos no se sentía tan sola. San Ricardo, el salvador de las mujeres ilusas, sí, sería un buen hér

Por fin abrió los ojos, se deshizo del hechizo que besos y caricias conjugaron contra ella, lo vio y también a ella. No dijo más,solo sonrió, hay algunas costumbres que nunca se pierden. Esta es la tercer vez en la semana que Luisiana se quedaba a dormir con Otto,  y casi nunca dormían. Estaba agotada pero satisfecha. "¿Quién en su sano juicio se negaría a ese cuerpo y cereal para el desayuno?" pensó mientras aceptaba volver la siguiente noche.Despertarse nunca fue tan grato para Otto, sentir el suave y esponjoso cuerpo de la morena cerca de él era la mejor manera de decir "buenos días mundo!" y el dormir nunca le pareció tan innecesario como estás ultimas semanas. Sí, los 15 minutos diarios se habían tornado en una relación, sin etiquetas, contaban ya unas cuantas semanas. Él no quería decir que eran novios, era más adecuado decir que eran amigos con derecho, privilegios pero sin ninguna responsabilidad, ni compromiso y mucho menos exclusividad. Ella, por otra pa

Este mes me diagnosticaron con cáncer en la tiroides, todavía no se que tipo ni que tan avanzado está. Pero no es de eso que quiero hablar, sino de todo lo que Dios ha echo por mí en esta semana. Déjenme contextualizar, hace 4 meses empecé a trabajar en una empresa de software, una meta que me había propuesto para este año, Dios me bendijo con esta oportunidad. Perfecto, todo brillaba distinto, super motivada. Para los que lo ignoran, soy de las principales fuentes de dinero en mi casa, me hago cargo de varios gastos y pues tengo mis deudas, pero me va bien. De repente me empece a sentir más y más cansada, realmente agotada, una noche mi mami me dijo: " Gorda, a vos ya te dio papera?". Y yo como: " no sé madre, se supone que vos deberías saber, hahaha, pero creo que si", -" es que tenés un cachete más grande que otra". Me mandaron al hospital, ese día me enojé en gran manera porque no estaban atendiendo, pero espere, me mandaron una referencia para que